Dijo: 'Pequeña criatura, hecha de Alegría y Regocijo,
Anda, ama sin la ayuda de ninguna Cosa en la Tierra.'
- William Blake
Cuando no reconozco lo que soy, volteo a ver al mundo (al tiempo, espacio, objetos, sustancias, gente) para aliviar, completar y consumar algo llamado 'Yo'. Rechazo todo aquello que parece amenazar la completud de mi 'Yo'. Entro en guerra con la experiencia presente con la esperanza de una futura salvación, creyendo que mi resistencia a este momento me conducirá hacia una futura plenitud. Vivo en el tiempo y en el deseo.
Pero al reconocerme como el infinito espacio de la presencia consciente que abraza incondicionalmente toda forma, como el inmenso océano de Ser en donde cada ola de pensamiento, emoción y percepción está profundamente admitida para que surja y desaparezca, veo que el mundo del tiempo y del espacio NUNCA podría completarme, ni TAMPOCO podría desacompletarme,
porque mi completud siempre está 'integrada' ¡y no puede ni ganarse ni perderse! Yo vivo previo al tiempo, en el eterno Ahora, que es mi Hogar.
Aquí, en Casa, soy incondicionalmente libre de amar sin temor la apariencia de todas las cosas, de amar esas fugaces y preciosas danzas de forma conocidas como 'mundo'; de abrazar perfectamente este mundo con toda su aparente imperfección, de amar a los demás exactamente como son, no por lo que yo desearía o esperaría que fueran. Descubro plenitud y facilidad verdadera en este momento, tal y como es, antes de cualquier 'agregado'. El círculo adictivo ha terminado, y descanso profundamente en el abrazo incondicional a la vida, dejándome caer en la cordialidad...
Jeff Foster
(Imagen: Pedro Inacio)
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