El hombre que detuvo el desierto.
En 1980, comenzó a practicar una metodología ancestral de siembra y cultivo, llamada “Zai”, logrando el crecimiento de la vegetación y mejorando la calidad de la tierra.
Zai es una técnica muy simple y de bajo costo: con una pala o un hacha, se cavan pequeños pozos en la tierra que posteriormente son llenados con abono y semillas. Estos pozos reciben y son capaces de almacenar el agua de la temporada de lluvias, logrando retener la humedad durante la época de sequía.
En la época de sequía Yacouba debía trabajar arduamente con su hacha para preparar la tierra para la llegada de las lluvias. Sus vecinos se reían de él, pero pronto debieron reconocen que tenía razón. En tan sólo 20 años, logró convertir una tierra vacía y desolada en un bosque de 30 acres, lleno